Quiero correr, correr, y salir de escena. Estar al límite donde lo verdadero y lo fantástico se mezcla. Quiero llegar al otro lado pero la realidad me absorbe por alguna razón en especial aparentemente "fantástica"
A veces me canso de correr pero no paro. No. Tengo un meta y quiero alcanzarla y es imposible que pare porque estoy harta de lo real, del dolor y la tristeza. Estoy harta de sentirme tan fracasada y sola.


Y estoy harta de pensar, de pensar que esto es estúpido y que nunca me voy a librar de todo. Quiero llorar y sentarme. Quiero cerrar los ojos, abrazar mis piernas con mis brazos y hacerme una pequeña bola insignificante. 
Quiero hacerme invisible. ¿total? estoy a solo un paso de llegar a hacerlo. 
Estoy sola a pesar de tener mucha gente que esté alrededor mío. Estoy sola y es la realidad. Y duele. Duele mucho y a veces es frustrante saber que nunca seras lo que queres ser ni tampoco seras tan importante para una persona como una persona es tan importante para vos. 


Quiero correr y quiero que alguien corra atrás mio pidiéndome por favor que no me valla, que no me valla a ningún lado. Pero es imposible, porque miro atrás y no hay nada. Y lloro, lloro porque es lo único que me acompaña siempre: la soledad. 


Y me siento tan sola que estoy siendo egoísta porque quiero irme, quiero dejar esta vida finita y quiero borrarme los recuerdos sin pensar en la gente que me quiere (me quieren pero no de la forma que yo necesito). 
Todos estos años pidiendo lo mismo, alguien que me ame ¿y que consigo? amar a alguien y que no sea recíproco a la manera que yo amo. 


Tal vez me encuentre sola durante muchos años más y acostumbrarme es el camino mas fácil. Amarme es el segundo camino que conlleva la palabra aprecio y es lo que menos tengo hacia mi misma. 
Porque me odio, porque me culpo a mi misma de la única causa por la que estoy sola y no puedo compartir con nadie todo esto. 


Estoy escribiendo con un nudo en la garganta que no me deja ni leer lo que en escrito pienso. 
Y lo ultimo que voy a decir es que odio tener tanto miedo de aceptar lo que siento en este preciso momento. Porque ¿no será la misma circunstancia que me persiguió durante cinco años? Es otra historia y, a veces, las nuevas historias ¿tienen el mismo final o el mismo comienzo?



Más que claro está, que simplemente estoy expresando mis opiniones porque si realmente queres saber la verdad, yo no me opondré. Probablemente no deje de correr, pero acabaré por rendirme y decirte lo que me sucede en este momento. 
Si queres detenerme, hacelo, y no te preocupes lo que yo vaya a pensar o cómo vaya a reaccionar... Aunque efectivamente preferiría que seas quien corra atras mio, me tome de la muñeca y me obligara a parar no me sentiré mal si no lo haces. No. Estoy acostumbrada a eso. Porque si no lo haces, tenes todo el derecho y nadie te dijo que lo hicieras. 

Sabes que estaré siempre acá porque, ¿sabes qué? Te lo prometí.